PRESUPUESTO 2025: LOS ECONOMISTAS VEN “RARISIMO” EL AMBICIOSO CALCULO DE UN 100,4% MAS DE RECAUDACION POR RETENCIONES.
Según expertos consultados por La Nacion, la meta es difícil de cumplir salvo que el tipo de cambio sea más alto que el de $1207 previsto en la iniciativa; no se espera una recuperación fuerte de los precios de los granos.
En el proyecto de presupuesto 2025 presentado por el presidente Javier Milei se estima que el ingreso por retenciones se duplicará. El campo aporta más del 80% del total de lo recaudado por esa vía. Los analistas consultados por La Nacion entienden que la meta es difícil de cumplir, salvo que el tipo de cambio sea más alto que el de $1207 previsto en la iniciativa. El punto es que no se proyectan una cosecha récord ni precios internacionales significativamente más altos el año próximo.
El economista Fausto Spotorno plantea que sin esos dos factores “ni una devaluación importante”, es “rarísimo” el cálculo oficial. Advierte que la alternativa es que en el equipo económico “estén esperando un tipo de cambio más alto $1207, que es más bajo que el que tenemos hoy”.
“Con los números del REM de inflación y del tipo de cambio podría ser que se duplique esa recaudación -señala-. Internamente la decisión pareciera no querer da señales de cuándo ni cómo se sale del cepo, a la vez que se insiste en que los dólares libres convergirán con el oficial. Se quedaron con ese rango y ahí es donde la cifra no da”. El último REM estima un tipo de cambio de $1515 para diciembre del año que viene y una inflación de 38,5%.
En los mercados internacionales no se espera una disparada de los precios -puede haber “alguna” mejora en maíz y trigo, pero no en soja- y, además, la próxima cosecha en la Argentina no pareciera ser récord. “Se espera una ‘mini Niña’ y eso complicaría la situación”, sostiene Spotorno.
Según los números de DataMiazzo, el campo aportó 81,4% del total de la recaudación por retenciones en 2020; 87,1% en 2021; 85,8% en 2022 y 82,3% en 2023. El economista, que preside la consultora, David Miazzo, hizo un análisis considerando proyecciones de producción y precios. Con las estimaciones de cosecha y los precios actuales, las retenciones aportarían entre US$6500 millones y US$7000 millones, con un tipo de cambio promedio de $1114 (es decir, $7,5 billones). “Como el agro en promedio aporta 85% de la recaudación total de las DEX, serían $8,8 billones, lo que implicaría una variación del 65% respecto a este año. Sí, un poco lejos del 100% previsto en el presupuesto”.
Miazzo ratifica que este año la recaudación por esa vía es “excepcionalmente baja para el nivel de cosecha por los precios internacionales bajos en el primer semestre y por el adelanto de registración de exportaciones a fines de 2023, antes de la devaluación de diciembre”.
Anoche, tras el discurso de Milei, el secretario de Hacienda, Carlos Guberman, habló en LN+ y esto dijo tras ser consultado sobre los derechos de exportación: “No estamos en principio apurando la decisión de la baja”. Y, respecto del aumento previsto en la recaudación por retenciones, el secretario de Hacienda explicó: “Hay una expectativa de precios de commodities mejores a los de este año. Esperamos una mejora en la soja. Ahora estamos pasando una etapa de precios de commodities muy malos. La expectativa es que mejore mucho. Va a empezar a moverse la exportación de otros sectores que van más allá de lo agrícola. Eso nos va a dar mejores resultados”.
Teo Zorroaquin, socio gerente de Zorraquín+Meneses, subraya que la “mala noticia es que no se habla de bajar” retenciones. Insiste en que para que se cumpla la proyección deberían aumentar la alícuota de las retenciones, que haya un fuerte incremento de los precios de los granos o un salto importante de los rendimientos y las retenciones se apliquen sobre un volumen más grande.
Tomas Allán, investigador de Recursos Naturales del think thank Fundar, señala: “Hay, a priori, inconsistencias no solo en eso sino en el capítulo de comercio exterior. Podría pensarse en una disparada del volumen, pero en cantidades la estimación es del 9%, con lo que la duplicación de la recaudación no puede venir por allí. Y tampoco por el tipo de cambio, porque prevén 18% de incremento. Lo que queda es que las retenciones se extiendan a más productos o sectores productivos, o las que ya están gravadas pasen a pagar más. Pero desde el Gobierno aseguran que no será así”.
Precios internacionales
Tomás Lucero, economista del Ieral de la Fundación Mediterránea, repasa que los precios internacionales de las principales commodities agrícolas argentinas ingresaron en un tobogán descendente a mediados del 2022, tendencia que se mantuvo hasta lo que va de este año. Como referencia, la soja en el mercado de Chicago pasó de US$613 la tonelada en promedio durante el 2022 a US$428. “La mayor preocupación es que no está aún claro si los precios alcanzaron su piso o sí, por el contrario, puede haber más malas noticias en lo que resta del 2024 y el año próximo”, advierte.
Por el momento, y según las operaciones de futuros realizadas en la primera semana de setiembre en Chicago, los precios se estarían ubicando en un promedio de US$371 la tonelada en el último cuatrimestre del año, 13% por debajo de los dos primeros cuatrimestres. En cuanto al 2025, las operaciones a futuro promedian los US$382 la tonelada “con algunas señales de recuperación o de piso, pero por ahora débiles”.
Para tener perspectiva, los valores que se están manejando en el mercado de la soja para el próximo año se ubican bastante por debajo del promedio de últimos 25 años (US$480 la tonelada) en poder de compra constante y hay que volver hasta el 2006 para encontrar un mercado con precios tan deprimidos.
En cuanto al aporte de divisas que puede generar el sector agroexportador en 2025, Lucero apunta que, si bien falta mucho y dependerá no sólo de los precios sino también de las cosechas (va a ser muy importante que el clima acompañe), un primer escenario de trabajo estima exportaciones por US$31.600millones, casi US$500 millones por debajo de las exportaciones que se lograrían este año (-1,5%).
Por: Gabriela Origlia.-
LA NACION.-