LIDERADO POR LA PRODUCCION DEL BIOETANOL, LA INDUSTRIALIZACION DEL MAIZ CRECE EN CORDOBA.
La industrialización del maíz en Córdoba alcanzó al 27% del total de la producción provincial, liderado por la producción del bioetanol.
Liderada por la producción de bioetanol, la industrialización de maíz en los últimos años en Córdoba ha crecido, superando las 4 millones de toneladas, lo que representa en promedio un 27% de la producción provincial, informó la Bolsa de Cereales provincial
El informe puntualiza que “la producción de maíz para la campaña 2022/23 alcanzó los 10,5 millones de toneladas, posicionándose como el valor más bajo desde el ciclo 2015/16″, como consecuencia de las adversidades meteorológicas que ocurrieron durante el ciclo del cultivo, provocando pérdidas de área y menores rendimientos.
Sin embargo, el consumo de maíz aumentó en este último periodo ubicándose en 4,3 millones de toneladas, un 10% más que el período anterior. Debido a esto y, considerando que la producción sufrió una gran caída, se incrementó el porcentaje de participación en relación con la producción en un récord del 41%.
Los usos del grano de maíz son variados, exhibiendo el potencial de los productos generados a partir del cereal que incorporan valor agregado.
En primer puesto tenemos la producción de etanol, también conocido como alcohol etílico, es un compuesto químico útil para la creación de combustibles. Para la producción de este se han destinado 1,6 millones de toneladas de maíz, lo que se traduce en un 37% del consumo total.
En segundo lugar, se ubica la producción ganadera, que utiliza el maíz para engorde del ganado y como una forma de suplementar la ingesta de pasturas de los animales. Esta actividad implica el uso de 815 mil toneladas del cereal.
En el tercer y cuarto puesto se encuentran la producción tambera y las granjas porcinas con un 17% y 10% de participación en el consumo total respectivamente. En este caso también el fin de utilización es para consumo de los animales.
En quinto lugar, con el 8% de participación en el consumo, se encuentra la molienda húmeda, la cual consiste en un proceso de maceración que separa los componentes básicos del maíz, esto es almidón, germen y gluten.
Con el 7% de participación, en la sexta categoría, se encuentran las granjas de producción aviar.
Por último, se encuentra la molienda seca con una participación del 2%. Esta consiste en un proceso mediante el cual se pueden obtener productos tales como harinas, sémolas, snacks, cereales, etcétera.
“Se estima que 1 de cada 4 toneladas de maíz se transforma en Córdoba, donde el potencial de crecimiento es aún inmenso”, indica el informe.