“FANTASMAS”: DEBEN US$55 MILLONES AL EXTERIOR Y ALERTAN POR UN TEMIDO ESCENARIO PARA LAS MASCOTAS.
La Cámara Argentina de Empresas de Nutrición Animal (Caena) advirtió por las dificultades derivadas de las trabas para importar y dijo que están en peligro insumos que deben llegar al país.
La Cámara Argentina de Empresas de Nutrición Animal (Caena) alertó sobre la situación que atraviesan las empresas de esta industria ante la falta de pago de importaciones de insumos. Según explicaron, si esta situación continúa, la cadena productiva podría verse obligada a frenar, por lo que derivaría en un desabastecimiento. Las empresas del sector, que hacen alimentos tanto para grandes animales como chicos, deben pagar aún al exterior unos US$55 millones.
“Desde Caena queremos manifestar nuestra extrema preocupación por la falta de pagos al exterior de importaciones de materias primas, como aminoácidos, las vitaminas y minerales que no se fabrican en la Argentina, que afecta y afectará a todo el sector de proteína animal, y que probablemente continuará afectando si no se pueden realizar pagos”, advirtieron. Advirtieron que “peligran los embarques” a la Argentina. “Volverán los fantasmas de desabastecimiento”, dijeron.
Francisco Schang, gerente de Caena, aclaró que si no se proveen de alimentos a la industria, se frena la industria de las proteínas. “En dos oportunidades de este año, entre febrero y marzo, después en octubre, se comenzó a ver una escasez de productos. Nosotros tenemos procesos; entre la importación a que recibís la mercadería son de 3 meses. Con esos ciclos, si se cortan, tenés el problema en el desarrollo del desabastecimiento. Nosotros no podemos abastecer a la cadena de la proteína animal. Hoy no tenemos precio, o sea, entonces al no tener precio tampoco generás una cadena donde la proteína no tiene precio. Ellos no tienen un costo”, indicó.
Según afirmó, esto ha generado inconvenientes en la cadena. “Nadie quiere ver ese escenario. Necesitamos certidumbre para que eso no suceda. Si nosotros no podemos pagar lo que ya debemos, no nos van a embarcar. Si eso comienza a pasar, no vamos a recibir materia prima para hacer el alimento balanceado”, planteó.
La intención de la cadena es evitar que esta situación lleve a un entorpecimiento en la producción de proteína animal. “Por el contexto difícil que le toca vivir a la Argentina, se agudiza el problema de fijación de precios que impide pronosticar a cuánto se va a poder vender y reponer la mercadería que posee componentes importados. Sumado a esto, están llegando ya denuncias de aseguradoras internacionales por estas faltas de pago, haciendo entrar en default a las empresas para poder comercializar en el exterior”, agregaron.
En este sentido, dijeron que generan mucha incertidumbre el precio de venta y costo de reposición ante la falta de previsibilidad del tipo de cambio al cual se va a poder pagar las importaciones ya nacionalizadas. “Esto derivaría en un freno a una industria que mueve a todo el sector de alimentación animal y por ende va a repercutir en los alimentos y proteínas como pollo, huevo, leche, carne y también alimento para mascotas”, precisaron.
“Dentro de este esquema nos imaginamos como sector tres posibles salidas (de las cuales se necesita una respuesta urgente). Organizar alguna vía especial de pago para sectores primarios o prioritarios (medicamentos, tecnología médica, nutrición animal, fertilizantes, etc.…) que nos permita (así como se hizo en la pandemia) priorizar a aquellos sectores prioritarios para la sociedad. Que se permita a aquellas que exportan poder utilizar sus dólares de exportación para el pago de las importaciones respectivas. Que se permita acceder al Contado Con Liqui o MEP sin la restricción de no haber accedido al MULC 90 días antes y 90 días después para que se pueda solucionar de forma más inmediata este tipo de importaciones prioritarias”, mencionaron.
Según contaron, desde el sector de nutrición animal se importan aproximadamente unos 250 millones de dólares por año y, además, debido a problemas internacionales, estas materias primas han aumentado su valor a nivel mundial y, por ende, importado un 44% menos que el año anterior, es decir, 2023 contra 2022.
“De lo nacionalizado por Caena en 2023 aún restan por pagar 55 millones de dólares de materia prima importada, que está en el mercado, pero que aún no ha sido pagada, es decir, Siras aprobadas, no pagadas y con mercadería ya nacionalizada. Esto es solo un pedacito de la deuda de 40.000 millones [de dólares] que compone una bomba tan grande para desarmar como las Leliqs y muestra a las claras que Argentina empieza a entrar en un default privado del cual no se conoce aún cuál será la salida”, remarcó la cámara.
Por: Belkis Martínez.-
LA NACION.-